El mercado de materias primas es un mercado financiero diverso y complejo, compuesto por varios tipos de materias primas, como metales, energía, productos agrícolas y materias primas blandas. Las materias primas blandas, en concreto, incluyen materias primas cultivadas como el café, el cacao, el algodón, el azúcar y la soja. Es un mercado en el que los operadores pueden comprar y vender contratos de estas materias primas para beneficiarse de las fluctuaciones de los precios.

Al igual que el mercado de divisas, el mercado de materias primas también se negocia en distintos mercados, como el de futuros, el de opciones y el de contratos por diferencias (CFD). Uno de los mercados más populares entre los clientes minoristas es el de CFD, en el que los operadores pueden comprar y vender fácilmente contratos sin poseer realmente la materia prima subyacente.

El mercado de CFD sobre materias primas está dominado por grandes bancos internacionales que proporcionan sus propias cotizaciones a través de sistemas electrónicos de negociación, y el mercado al contado sirve de punto de referencia para estas cotizaciones. Como tal, los precios no son uniformes en todo el mercado.

Los precios de las materias primas están influidos por varios factores, como la oferta y la demanda, los acontecimientos geopolíticos, las pautas meteorológicas y los indicadores económicos. Por ejemplo, el precio del café puede verse afectado por las condiciones meteorológicas en Brasil, el mayor productor mundial de café, o la demanda de soja puede verse afectada por la creciente tendencia de las dietas basadas en plantas.